sábado, 28 de marzo de 2009

Preparativos e itinerario



Es increíble todas las cosas que hay que hacer antes de salir de viaje, pero cuando el destino es Europa y se viaja de mochilero, casi sin lugar de residencia fija, los preparativos tardan el doble. Fueron casi tres meses de reunirse, chequear mapas y ver los horarios de los transportes porque la pérdida de un tren o un ferry, en un itinerario de casi dos meses y con tantas ciudades por recorrer, implica perder un día que a la postre puede resultar muy valioso. El recorrido, que empieza en Madrid, será en tren hasta París, luego en ferry hasta Irlanda, un nuevo ferry hacia Inglaterra y otro más hasta Bélgica. Allí retomaremos el tren haciendo Brujas, Amsterdam, Copenague, Estocolmo, Berlín, Praga Viena, Venecia, Roma, Nápoli, Sorrento, Positano, Capri y Bari. Desde Bari sale un ferry que nos lleva hasta Patras y de Patras un trencito nos arrimará hasta la cuna de la civilización: Atenas. Desde Atenas sale un crucerito hasta Santorini, una isla griega de ensueño que no nos queremos perder, y de allí volveremos a Atenas para tomar un vuelo hasta Milan y hacer la costa azul: Niza, Cannes, Monaco y Marsella, para luego llegar a Barcelona y hacer Palma de Mallorca. Este sería el itinerario a priori, que seguramente se modificara sobre la marcha o como dicen los yanquis "on the road". Cuando digo "retomaremos" o "no nos queremos perder" no estoy cometiendo un error gramatical, sino que le estoy dando voz a mi compañero de viaje (que se los presento en la foto) Juan Padin, gran amigo desde la adolescencia y compañero de ruta en esta aventura.